sábado, 22 de octubre de 2016
Hay muchos mitos respecto a lo que sucede después de la muerte. Se habla de resurrección, aparición de fantasmas, de un mundo después de la muerte. Lo cierto es que no somos inmortales y estamos conscientes de que en cualquier momento podemos ser nosotros los que dejamos de pertenecer a este mundo y esperar lo que suceda después de esto.
Cuando muere una persona su espíritu sale de su cuerpo y flota, por lo cual puede verlo inmóvil, incluso ver el lugar donde se encuentra y las personas que están presentes en ese momento.
Se dice que cuando las personas están inconscientes o se está luchando entre la vida y la muerte, se ve una luz a lo lejano de un pasillo oscuro, y el llegar a la luz es llegar a la vida plena.
La muerte es igual al descanso eterno; ya no habrá más problemas sentimentales, estrés de trabajo, o enfermedades que causen dolor, pues se llega a la plenitud.
Se habla de tal tranquilidad que hará que ya no haya más problemas ni un mañana para solucionarlos, pues la muerte es tranquilidad.
Aún cuando la persona está inconsciente, puede escuchar y ver lo que está pasando a su alrededor.
Muchas personas que han estado a punto de morir dicen que ven pasar los mejores y peores momentos que tuvieron, como un recuento de lo que se vivió.
Cuando se mueren las personas dejan de existir, sin embargo hay quienes aseguran que entes paranormales se hacen presentes en nuestra vida, ya que son aquellos que se fueron de este mundo dejando problemas sin resolver.
Desde pequeños siempre nos dicen que hay un ángel que nos cuida y nos protege de los males; que nos acompaña en todo momento.
Momentos antes de morir las personas comentan que han recibido visitas continuas de sus parientes que ya han muerto, que son los que les están indicando el camino hacia la muerte.
Según como fue el comportamiento de la persona cuando estuvo en vida, irá al cielo o al infierno, ya que las acciones positivas o negativas son las que determinan el destino de quien muere.
